Fútbol
VÍDEO: ¡Un aficionado del Burdeos agredió a un jugador rival tras encajar un gol! El partido fue suspendido y su equipo perdió las esperanzas de ascender a la Ligue 1
Eso no se ve así como así El Girondins de Burdeos luchó por regresar a la elite, pero cedió en el minuto 22. Uno de los aficionados empujó a un jugador rival y éste cayó teatralmente al suelo. El árbitro detuvo el partido y lo dio por concluido.
Eso no se ve así como así El Girondins de Burdeos luchó por regresar a la elite, pero cedió en el minuto 22. Uno de los aficionados empujó a un jugador rival y éste cayó teatralmente al suelo. El árbitro detuvo el partido y lo dio por concluido.
El Girondins de Burdeos es un club tradicional, pero ahora tiene que nadar en la segunda división. Luchaban por regresar a la élite, pero por desgracia el último partido se decantó para ellos.
El Girondins de Burdeos recibía en casa al Rodez y estaba claro que ninguno de los dos equipos quería dejar escapar nada mientras los visitantes luchaban por no descender. Y así parecía.
El Rodez se adelantó en el minuto 22 por mediación de Lucas Buades y, de hecho, fue el último momento del partido. Buades lo celebró ante la afición bordelesa, y a uno de ellos no le gustó nada.
Le siguió hasta el césped y le empujó, sin que los comisarios, que eran demasiados en el sector, reaccionaran. Buades cayó teatralmente al suelo como si le hubieran disparado.
A pesar de haber exagerado mucho, el árbitro tuvo que detener el partido, ya que no es posible que un aficionado ataque a un jugador en el terreno de juego y continúe el partido sin problemas.
Al final, decidió parar el partido, con lo que el Burdeos perdió toda esperanza. Por supuesto, aunque hubieran conseguido llevar el partido a un final victorioso, no les habría servido de nada.
El Le Havre logró vencer al Dijon y ganó la liga con 75 puntos, el Méty venció al Bastia y si el Burdeos hubiera ganado habría tenido los mismos puntos pero peor puntuación.
El Rodez puede celebrarlo. Un empate les asegurará la permanencia en segunda división, algo que pocos aficionados esperaban antes del partido.
Pero también se interrumpió en el partido del ganador de la liga. Los aficionados corrieron al campo antes de tiempo y esperaron 20 minutos a que se reanudara. Pero eso básicamente nunca ocurrió.
Sólo el equipo local saltó al campo, el Dijon se negó a entrar, quizá pensando que el partido podría suspenderse y se llevarían los importantísimos tres puntos en bandeja. Pero no fue así, el árbitro pitó el final y las celebraciones pudieron continuar.
Fuente: Twitter, Ligue 2