Conference League
Una ventana al pasado: el West Ham United ganó en Edén su segundo trofeo europeo. El camino hacia el primero también pasaba por Praga
El West Ham United inglés se impuso por 2-1 al AFC Fiorentina italiano en el Eden Stadium, que acogió la final de la Liga de la Conferencia. Añadió un segundo trofeo europeo a su palmarés. El primero fue en 1964/1965, cuando ganó la desaparecida Recopa.
El West Ham United se impuso por 2-1 a la AFC Fiorentina en el Eden Stadium, que acogió la final de la Conference League. Añadió un segundo trofeo europeo a su palmarés. El primero fue en 1964/1965, cuando ganó la desaparecida Recopa. Y el camino hacia el triunfo también pasaba por Praga.
El West Ham United, con sede en el distrito de Stratford, al este de Londres, se fundó en 1895 con el nombre de Thames Ironworks FC, el actual que lleva desde 1900. Nunca ha conquistado la máxima competición liguera de Inglaterra, pero sí la preciada Copa de Inglaterra en tres ocasiones: 1963/1964, 1974/1975 y 1979/1980.
Y siguió a su primer récord, vencer al Preston North End por 3-2 en la final de Wembley, con éxitos en la escena internacional. Se clasificó para la Recopa y lo hizo de forma muy competente.
En la primera ronda, el equipo inglés eliminó al equipo belga KAA Gent (1:0 y 1:1), en la segunda ronda al representante checoslovaco Sparta Praha (entonces Spartak Sokolovo) tras los resultados 2:0 y 1:2, ambos goles marcados por Ivan Mraz. Los Hammers también se presentaron entonces en Praga, 45 mil espectadores acudieron a Letná.
En cuartos de final los Hammers derrotaron a los suizos Lausanne Sports 2: 1 y 4: 3, en semifinales a los españoles Real Zaragoza 2: 1 y 1: 1.
Y llegó la famosa final contra el Munich 1860 alemán, que por aquel entonces todavía sonaba a tintineo. Se jugó en Londres, en el estadio de Wembley, por lo que el equipo inglés estaba en casa, con 97 974 aficionados que acudieron a animarles.
La victoria por 2-0 se decidió con dos goles del delantero Alan Sealey (minutos 70 y 72). El equipo estaba dirigido por el carismático entrenador Roy Greenwood y estaba formado únicamente por jugadores ingleses.
El equipo estaba capitaneado por el legendario portero Bobby Moore, que un año después levantó el trofeo de la Copa Mundial en el mismo estadio, cuando Inglaterra venció a Alemania por 4-2 en la prórroga de la final.
Tres goles fueron obra de otro jugador del West Ham, el delantero Geoff Hurst, y su compañero Martin Peters añadió el cuarto. Los jugadores del club londinense tuvieron así una importante participación en el único título mundial del país donde se originó el fútbol.
Fuente: UEFA