Un talento desperdiciado: Hulk no llegó a ser una estrella mundial, pero disfrutó al máximo del fútbol

Cada año, cada temporada y, a menudo, cada mes, emerge a la superficie de la fama futbolística toda una nueva cosecha de flamantes jóvenes a los que se «garantiza» que convertirán su talento en éxito y se convertirán en estrellas de talla mundial. Pocos están a la altura de estas expectativas y la inmensa mayoría no logra ni siquiera una fracción del éxito previsto. Uno de esos menos exitosos es el tanque del fútbol Givanildo Vieira de Souza, más conocido como Hulk.

De Japón al Oporto

El lateral izquierdo brasileño comenzó su carrera en el Vitória, un club más modesto, pero no logró causar una buena impresión allí y fue vendido a Japón. Allí, en la J1 League, alternó entre varios clubes antes de ser fichado por el conocido FC Porto portugués en 2008.

Fue en la ciudad de la costa oeste de Portugal donde el joven delantero se encontró a sí mismo. El entonces jugador de veintiún años terminó su primera temporada en Europa con unas estadísticas de 9+9 y mejoró casi exclusivamente sus números en las siguientes. En la temporada 2010/11 se unió a Radamel Falcao, delantero recién llegado, y el dúo sudamericano arrasó no sólo en las competiciones nacionales, sino también en la Europa League.

Mentalidad diferente

Y es en comparación con el colombiano donde, en retrospectiva, se aprecia claramente la diferencia de ambición. Mientras su estrella ascendía hacia el Atlético de Madrid o el Mónaco, la carrera de Hulk tomó un rumbo diametralmente distinto y, un año después de la marcha de Falcao, fue atraído por el Zenit de San Petersburgo ruso a cambio de un sueldo multimillonario.

Más salario, menos calidad. Así podría resumirse la Premier League rusa de la época, que el corpulento brasileño dominaba claramente. En cuatro años en el frío ambiente eslavo, marcó 77 goles y dio 59 asistencias. Todavía era objeto de interés por parte de algunos de los principales clubes europeos, y aquí y allá se especuló con la marcha de Hulk, pero el oriundo de Campina Grande fue fiel a los colores celestes del Zenit.

Piezas de oro chinas

Así fue hasta 2016, cuando más de un club de la Premier League o de La Liga se lanzó a por él. Pero el todocampista ofensivo brasileño volvió a escuchar el atractivo de las monedas de relumbrón con menor calidad futbolística y dio el visto bueno a una oferta del club chino Shanghai SIPG. Aunque, para ser justos, un salario de 320.000 libras a la semana es ciertamente difícil de rechazar.

Por supuesto, Hulk reinó en la Superliga china e incluso celebró la conquista del título de liga con sus compañeros antes de regresar a Brasil el pasado mes de marzo, donde actualmente viste la camiseta del Atlético Mineiro.

Echando la vista atrás, el talento de Hulk parece puramente desaprovechado. En cambio, el musculoso mediapunta ha disfrutado claramente del fútbol en su conjunto a lo largo de toda su carrera, incluso en competiciones de menor calidad y seguimiento. Incluso desde ellas logró abrirse paso hasta la selección canaria y olfatear la pompa de las copas de Europa.

No llegó a ser una superestrella mundial, pero sin duda disfrutó al máximo de su carrera en activo, como sólo pueden hacerlo los brasileños.

Fuentes: Transfermarkt, WhoScored