¿Un Bayern aún más perfecto? ¡Es posible! Nagelsmann ha protagonizado el mejor arranque de la historia del club, pero sigue exigiendo mejoras

El Bayern comenzó la nueva temporada con un nuevo entrenador, el perfeccionista Julian Nagelsmann, que sustituyó a Hansi Flick. Flick había tenido un éxito increíble, por lo que no era demasiado esperar que el técnico de 33 años pudiera sustituirle a la perfección de inmediato. Pero así ha sido.

Cuando Hansi Flick terminó su etapa como entrenador del Bayern, en Múnich se respiraba cierta tristeza. Y no era para menos. Aunque el actual seleccionador llevaba relativamente poco tiempo en el cargo, había ganado todo lo que había que ganar.

Convirtió al equipo bávaro en una máquina casi imparable que no sólo conseguía resultados, sino que también divertía con su juego.

El talentoso Julian Nagelsmann tenía y tiene una dura tarea por delante. Tiene que sustituirle por completo. No se esperaba que triunfara desde el principio, y sin embargo lo hizo.

No parecía demasiado fabuloso en los prolegómenos. De los cuatro amistosos previos a la nueva temporada, el Bayern no ganó ninguno: perdió 3:2 contra el Colonia, 2:0 contra el Mönchengladbach y 3:0 contra el Nápoles. Sólo contra el Ajax empató 2-2.

No se podía decir que hubiera mucho optimismo en la afición del gigante muniqués antes de la temporada. El fracaso de los bávaros en la primera jornada de liga en Mönchengladbach (1:1) no contribuyó a aumentar el positivismo.

Pero fue la primera y también la última vacilación en partidos oficiales esta temporada. Desde entonces, el Bayern ha jugado 9 partidos y ha ganado todos menos uno de forma dominante.

Nagelsmann ha protagonizado, por tanto, el mejor comienzo de su mandato como entrenador del Bayern en la historia del club. Posee dos récords espectaculares.

Ningún entrenador del Bayern había logrado 9 victorias en sus 10 primeros partidos oficiales. El otro récord es la diferencia de goles. Los bávaros han marcado 46 goles (4,6 goles por partido) y sólo han encajado 6. Además, han podido disfrutar de la Supercopa de Alemania.

Se podría argumentar que Múnich no se enfrentó a ningún rival difícil. Pero lo cierto es que la Bundesliga sigue estando muy infravalorada y el Bayern ya ha conseguido vencer al Dortmund (3:1) y al Leipzig (4:1), dos de sus mayores rivales. Luego, en la Liga de Campeones, destrozaron al Barcelona (3:0) y no permitieron ni un solo tiro a puerta.

Así que Nagelsmann lo está haciendo muy bien. Incluso jugadores a los que su predecesor no pudo igualar lo están haciendo bien. Un buen ejemplo es el brillante Leroy Sané. A todas luces, el Bayern deberá ser considerado uno de los grandes favoritos para ganar la Liga de Campeones.

¿Y estaría muy satisfecho el talentoso entrenador? Por un lado, ha mostrado su alegría, pero sigue pidiendo más a sus jugadores. «Nunca es fácil mantener la máxima concentración. Todavía hay muchas cosas que se pueden mejorar», expresó tras la victoria por 5: 0 contra el Dinamo de Kiev.

Así que si parecía que el Bayern no podía mejorar mucho, es todo lo contrario. Y tal y como hacen pensar las declaraciones de Nagelsmann, el potencial es extremo. ¿Veremos una dinastía bávara?

Fuente: Sports Max, Transfermarkt, Bayern de Múnich