Otra vez el VAR Los agraviados jugadores de Boca Juniors querían hablar con los árbitros después del partido. ¡La policía brasileña tuvo que intervenir!

Los jugadores de Boca Juniors se sintieron agraviados después de que el VAR no concediera lo que ellos consideraban un gol legítimo. Tras la consiguiente derrota, no pudieron contener sus emociones y se produjo una gran refriega en el túnel del estadio entre los dos equipos y, posteriormente, la policía brasileña.

En las semifinales de la Copa Libertadores de América del Sur se enfrentaron el Atlético Mineiro brasileño y el Boca Juniors argentino.

Ambos partidos acabaron con empate a cero en el tiempo reglamentario, mientras que en los dos partidos se anuló un gol al equipo argentino tras una revisión del árbitro de vídeo.

Tras la tanda de penaltis, el Atlético Mineiro acabó avanzando, pero la cosa no acabó ahí, sino todo lo contrario. Los jugadores y la directiva de Boca tenían la certeza absoluta de que habían descendido injustamente.

«Sin dudas, todo el mundo lo vio. Hicimos lindos goles y la realidad es que tendríamos que haber ganado el primer partido. Nos duele, nos sentimos mal. La Conmebool (Asociación Sudafricana de Fútbol) debería centrarse en los árbitros», declaró Diego Gonzales, centrocampista de Boca, cuando se le preguntó si el árbitro había desempeñado un papel importante en su eliminación.

Tras el pitido final, los jugadores se dirigieron al túnel, donde las cosas empezaron a calentarse. Primero, los jugadores de ambos equipos intercambiaron palabras malsonantes. Luego empezaron las agresiones físicas y todo lo que los jugadores tenían a mano, incluso barreras metálicas, empezó a volar por los aires.

Los jugadores argentinos querían llegar hasta los árbitros y, probablemente, salirse con la suya. Sin embargo, se lo impidió la intervención de la policía, que incluso utilizó gases lacrimógenos como medio de coacción.

Fuente: Goal