La trágica historia del protegido de Rocky, Tommy Gunn, que supuestamente tenía más poder de nocaut que el temido Mike Tyson

La historia de Tommy Morrison, conocido por los profanos como el personaje «Tommy Gunn» de la película Rocky 5, terminó de forma muy triste. Así que recordemos al hombre que boxeó en los años 90 y del que se rumoreaba que tenía más poder de nocaut que el temido Mike Tyson.

Tommy Morrison conquistó el mundo del boxeo y la pantalla

Tommy «The Duke» Morrison fue uno de los mejores boxeadores de su generación y cuenta con varias victorias famosas en su currículum. La mayoría de los aficionados le conocen como el joven y prometedor boxeador Tommy «The Machine» Gunn, cuyo personaje interpretó en la quinta entrega de la exitosa franquicia Rocky de Sylvester Stallone.

Pero pocos saben que Tommy Morrison fue un boxeador de éxito en su época, con las cabelleras de leyendas del boxeo como George Foreman y Donovan «Razor» Ruddock.

Muchos aficionados de la época querían verle en el ring con el hombre más temible del planeta, el legendario Mike Tyson. Por desgracia, el combate que podría haber hecho historia en el boxeo nunca llegó a producirse.

Durante su carrera como boxeador profesional, Morrison aterrorizaba a sus rivales con un impresionante gancho de izquierda que cortaba instantáneamente a su oponente como si fueran bolos. Tommy llevaba luchando desde los diez años, y durante su carrera de aficionado participó en la increíble cifra de 222 combates, de los que ganó 202.

Comenzó su carrera de boxeador profesional en 1988, noqueando en el primer asalto a William Muhammad. En sólo un año de carrera profesional, ganó la increíble cifra de veinte combates.

Su inmenso talento llamó la atención del actor y cineasta Sylvester Stallone, que lo incluyó en el reparto de su película Rocky 5. Un año más tarde, Tommy consiguió seis victorias en la primera pelea de su carrera. Un año después, Tommy se tomó un descanso de seis meses del boxeo para centrarse en el cine. Esto pudo influir en su actuación en el primer combate por el título de la OMB de su carrera, en el que fue noqueado en el quinto asalto por el entonces invicto Ray Mercer.

También se ganó la cabellera del legendario George Foreman

Pero tras la primera derrota de su carrera profesional, volvió a la racha de victorias. Tras ocho victorias consecutivas, consiguió otra oportunidad por el título contra el legendario George Foreman, que compartió ring con Muhammad Ali en el memorable combate «Rumble in the jungle». En el combate de su vida, fue capaz de derrotar a la leyenda del boxeo mundial por puntos para hacerse con el título de campeón de los pesos pesados de la OMB.

Defendió y perdió su cinturón de campeón ese mismo año al caer derrotado ante Michael Bentt. El último verdugo de Morrison fue otra leyenda, Lennox Lewis, que ganó por nocaut técnico en el sexto asalto.

Un estilo de vida alocado arruinó la carrera de un deportista de éxito

Pero las cosas empezaron a cambiar drásticamente para Morrison. En 1996, anunció que había dado positivo en la prueba del VIH, aduciendo como motivo un estilo de vida temerario. Como consecuencia, la Comisión Atlética de Nevada le prohibió boxear y la prometedora carrera del boxeador de 27 años llegó a su fin. Morrison intentó impugnar los resultados de las pruebas con su mujer, pero fue en vano. Después de eso, su vida fue cuesta abajo.

Entre 1997 y 2000 fue detenido varias veces por delitos contra la ley, sobre todo por conducir bajo los efectos del alcohol. En 2000 fue condenado a dos años de cárcel por conducción errática, y la policía encontró drogas y armas de fuego en el coche del boxeador. La triste historia de un gran boxeador.

Tras su puesta en libertad, Morrison aún intentó resucitar su carrera boxística e incluso llegó a participar en dos combates, tras dar negativo en cuatro pruebas que le valieron la licencia.

Ganó ambos combates por TKO y ajustó su récord profesional a 48-3-1. Sin embargo, después de eso estalló un escándalo relacionado con la manipulación de las muestras de sangre de Morrison y no entró en más peleas. En 2013, ya no podía moverse sin ayuda y, a los 44 años, el viaje de su vida terminó debido a un fallo orgánico multisistémico.

Fuente: ESPN, Boxing News Online, Twitter