Bundesliga
Historias de fieles: el pequeño gran hombre Philipp Lahm es un icono del Bayern de Múnich
Si tuviéramos que pensar en jugadores que fueran auténticos rompecorazones, sin duda Philipp Lahm no debería faltar en la selección. El pequeño defensa no sólo se caracterizaba por su tenacidad, que tenía que ejercer debido a su estatura, sino también por su lealtad al Bayern de Múnich.
Si tuviéramos que pensar en jugadores que fueran auténticos rompecorazones, sin duda Philipp Lahm no debería faltar en la selección. El pequeño defensa no sólo se caracterizaba por su tenacidad, que tenía que ejercer debido a su estatura, sino también por su lealtad al Bayern de Múnich.
Tales of the Loyalists es una serie de Ruik que sigue a jugadores que han dedicado toda o la mayor parte de su carrera a un club. En la edición de hoy, nos fijamos en el defensa del Bayern de Múnich Philipp Lahm.
Lleva en el equipo muniqués desde que era un niño
Philipp Lahm nació en Múnich, donde también empezó a jugar al fútbol muy joven. En sus inicios jugó en el Gern de Múnich, de donde pasó al más famoso Bayern a los doce años.
También aquí, el centrocampista alemán pasó toda su carrera, salvo dos temporadas como invitado en el Stuttgart. En el Bayern, sin embargo, ascendió de suplente a capitán del equipo principal.
Lahm era típico de su pequeña estatura. Aunque sólo medía 1,70 metros, esto no era un hándicap en su caso. Lo compensaba todo con su agilidad y tenacidad, que le valieron el título de uno de los mejores defensas del mundo.
Sus duelos con Jan Koller, por ejemplo, que mide más de dos metros, eran divertidos. Sin embargo, Lahm tampoco se rendía en estas peleas y se enfrentaba cara a cara.
14 temporadas de éxitos
Jugó un total de 332 partidos con el Bayern de Múnich. Es ocho veces campeón de Alemania y ha ganado siete veces la Copa de Alemania. Pero también ha triunfado en la escena europea.
La temporada más exitosa fue la 2012/2013. Entonces el Bayern tenía un equipo muy fuerte, que se confirmó al ganar el triplete. Además de los títulos nacionales de Liga y Copa, también ganó la Liga de Campeones absoluta.
En la final de Wembley, con Lahm de titular, derrotó al Borussia Dortmund para dominar el fútbol europeo. A continuación, el Bayern confirmó este triunfo con la conquista de la Supercopa.
También triunfó en la escena nacional. Aunque no tiene ningún título europeo en su colección, sí levantó el trofeo de campeón del mundo en 2014. En total, suma 113 partidos con la selección.
Lahm se retiró en 2017 a los 33 años. Dejó una gran huella en la historia del fútbol. Los aficionados le adoraban por sus actuaciones, así como por su comportamiento humilde. Todavía se le considera una leyenda del club en el Bayern.
Fuente: Livesport