Ganar la Supercopa ha despertado el hambre de trofeos del Real Madrid. Vamos a por todos los títulos, dicen los entrenadores y la directiva

El Real Madrid vuelve a tener miedo. Ya no es Cristiano Ronaldo quien asusta a los defensas rivales, sino los siempre impresionantes Benzema, Modric, Kroos y los jóvenes Vinícius, Rodrygo y Valverde. Los Blancos, tras ganar el primer trofeo, anuncian un ataque a los restantes.

Tras la marcha de Cristiano Ronaldo del Real Madrid, el club cayó en una crisis a la que no estaba acostumbrado. Dos veces seguidas cayó eliminado en octavos de final de la Liga de Campeones, y en su primera temporada sin el portugués, el Real acabó tercero en la liga.

Tras el regreso de Zinedine Zidane, sí ganó la liga, pero se debió más a un gran trabajo defensivo, nada de ofensivas frenéticas. La temporada pasada con el técnico francés, el Real acabó segundo en liga, en semifinales de la Liga de Campeones y de la Supercopa de España, y en la primera ronda de la Copa del Rey, por lo que no alcanzó ningún trofeo.

Pero desde la llegada en verano del nuevo entrenador, Carlo Ancelotti, el Real Madrid ha vuelto a las andadas. Históricamente, ostenta el trono de club más laureado del mundo, y los merengues están volviendo poco a poco a lo más alto.

Y eso que Ancelotti no ha hecho grandes fichajes en la ofensiva, pues al Santiago Bernabéu sólo han llegado David Alaba y Eduardo Camavinga. Además, tuvo que hacer frente a la marcha de la pareja de porteros de toda la vida Ramos – Varane. Los temores de los aficionados estaban, pues, justificados, pero hace tiempo que han desaparecido.

El estratega italiano ha convertido al club en una máquina increíble que funciona sin problemas. El dúo ofensivo Benzema – Vinícius brilla, el centro del campo sigue dominado por el trío inmortal Casemiro – Kroos – Modric. El dúo Alaba – Militao se ha mostrado rapidísimo en el lateral, mientras que Courtois está encantador en la portería. Ancelotti tiene mucho margen, con Rodrygo, Valverde, Camavinga, Lucas y Nacho ayudando al equipo desde el banquillo.

Tras ganar la Supercopa de España, la euforia del club madrileño es desbordante.

«Estoy muy contento de estar aquí, de volver a ganar con el Real Madrid. Es un orgullo entrenar a este club. Vamos a luchar por más títulos», exhortó Ancelotti a sus pupilos tras la final.

Sólo el hecho de que estas palabras vengan de alguien que definitivamente no vuela con la cabeza en las nubes es una gran señal para los aficionados del Ballet Blanco. Ancelotti casi siempre mantiene la cabeza baja y no se deja llevar por sus emociones. Si lo ha dicho, lo cree de verdad. Tiene la base perfecta para ello.

«En primer lugar, tengo un gran equipo a mi disposición. En segundo lugar, el ambiente en el equipo y en el club en general es perfecto. Tenemos fuerza para luchar por todas las competiciones. Es un equipo al que me gusta ver. No tenemos una sola forma de jugar, tenemos varias y ésa es la fuerza de este equipo», añadió Ancelotti.

El presidente del club, Florentino Pérez, piensa lo mismo. Estamos al principio de una nueva era», confía Pérez.

La sequía de títulos que ha durado año y medio ha dejado al Madrid muy hambriento. Para los jugadores, la directiva y la afición. Por eso ya hablan de otros trofeos por adelantado, en la capital de España simplemente creen que tienen lo que hay que tener.

Fuente: Marca