Europa League
Gales casi se ha asegurado el ascenso con una victoria, Turquía está casi descartada. Bale brilla y tira un penalti
Ambos equipos necesitaban puntuar para avanzar. Turquía habría quedado eliminada con otra derrota tras su 3-0 inicial, mientras que Gales necesitaba hacer pleno de puntos antes de su partido contra Italia. Al final, el partido fue mejor para los de Bale.
Ambos equipos necesitaban puntuar para avanzar. Turquía habría quedado eliminada con otra derrota tras su 3:0 inicial, mientras que Gales necesitaba hacer pleno de puntos antes de su partido contra Italia. Al final, el partido fue mejor para los de Bale, que avanzaron a octavos.
El seleccionador turco prometió a los aficionados que, tras la mala actuación contra Italia, su siguiente actuación sería muy distinta. Pero parece que sus pupilos no escucharon esa promesa.
En el minuto 6, Gareth Bale encontró a Aaron Ramse en una defensa turca abierta, que encontró a Söyüncü en el área pequeña y remató al primer larguero. Pero Ugurcan Cakir realizó otra gran parada para mantener a los turcos en el partido.
Pero Turquía seguía jugando muy mal y la defensa no parecía funcionar en absoluto. En el minuto 17, los galeses volvieron a plantarse ante la portería contraria, Söyüncü tocó con la mano, pero el árbitro no pitó penalti.
En el minuto 24 llegó otro aviso. Bale volvió a encontrar a Aaron Ramsey en la cal, pero disparó alto por encima. La defensa turca continuó con su ritmo laxo y a la tercera fue la vencida.
En el minuto 42, el capitán de Gales, Gareth Bale, encontró el balón en el fondo del área y, con un maravilloso pase a la espalda de la defensa, invitó a Aaron Ramsey a marcar de nuevo. Trabajó el balón con el pecho y lo envió a la red por encima de Cakir, dejando a la defensa turca parada como un escaldado. Era el 1:0 para Gales que se iba a las cabinas.
En el minuto 54, los turcos por fin abrieron brecha. Demiral sacó un córner y lo devolvió al área pequeña, donde Burak Yilmaz estaba completamente solo. Pero desperdició su oportunidad y disparó alto por encima del larguero.
Dos minutos más tarde, Aaron Ramsey volvió a tener una ocasión, pero no sumó un segundo gol. En el minuto 60, el capitán Gareth Bale llegó de nuevo al balón, lo condujo al área y lo pasó por encima de la pierna de Celik. El árbitro no lo dudó y pitó penalti.
Fue el propio Bale quien lanzó la pena máxima, pero una vez más se confirmó la regla no escrita del fútbol. Es decir, nunca dejes que un jugador que ha recibido una falta tire un penalti. El delantero del Real Madrid disparó por encima del larguero.
Entonces los turcos olieron una oportunidad y empezaron a apretar un poco las tuercas. Gales, en cambio, se atrincheró más y esperó una contra rápida. Durante mucho tiempo, Yilmaz y compañía no lograron ninguna ocasión de gol, pero en el minuto 88 llegó un saque de esquina.
El remate de cabeza de Merih Demiral se marchó rozando el poste, pero Danny Ward realizó una magnífica parada.
Hacia el final del partido, los turcos se estaban frustrando, y el capitán Burak Yilmaz se vio envuelto en una trifulca. Pero no pudieron hacer nada por cambiar el resultado, sino que fue Gales quien cambió el marcador.
Gareth Bale cabeceó un saque de esquina hasta la línea de cal en el minuto 95, cedió el balón a Roberts, que aumentó el marcador a 2-0 y envió casi con toda seguridad a Gales a octavos.
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