MMA
¡Eso fue brutal! El verdugo checo de los británicos recibió un fuerte rodillazo en la ingle. ¿Cuál fue la suerte de Bahník según Kinc?
De los tres checos que debían competir en el estreno de Oktagon en Inglaterra, sólo dos lucharon y sólo uno ganó. Jaroslav Pokorný y Jakub Bahník tuvieron muy mala suerte. El primero ni siquiera pudo saltar al combate, la pelea del segundo terminó a los 25 segundos.
De los tres checos que debían competir en el estreno de Oktagon en Inglaterra, sólo dos lucharon y sólo uno ganó. Jaroslav Pokorný y Jakub Bahník tuvieron muy mala suerte. El primero ni siquiera pudo saltar al combate, la pelea del segundo terminó a los 25 segundos.
Es como si Manchester estuviera maldito para Oktagon y la República Checa. En primer lugar, no se cumplió del todo el objetivo de llenar al máximo el local AO Arena, al que acudieron unos 5.000 espectadores, pero consiguieron crear un ambiente muy sólido.
Incluso antes del torneo hubo un problema para uno de los luchadores checos. Jaroslav Pokorný recibió una fuerte patada en las costillas durante un acalorado cara a cara con Shem Rock y los médicos no le recomendaron en absoluto que participara en el combate.
Zdeněk Polívka parecía ser el único checo que «hacía clic» en Manchester. Rompió una racha de dos combates perdidos y volvió a la senda de la victoria al derrotar al veterano Lee Chadwick.
Jakub Bahník tuvo muy mala suerte. El verdugo de las estrellas británicas planeaba ejecutar a otro inglés. Esta vez la estrella emergente y gran promesa Akonne Wanliss. Por desgracia, ese plan pronto se quedó en nada.
Bahnik no pudo seguir luchando tras recibir un fuerte golpe en la ingle
El duelo Wanliss vs. Mudnik prometía un atractivo espectáculo de stand-up, muy posiblemente algún nocaut espectacular, pero no lo conseguimos. ¿La razón? El inglés optó por un rodillazo, pero el checo hizo lo mismo poco después y se arrepintió.
Wanliss golpeó con fuerza al púgil checo en la ingle y éste cayó. La continuación del combate parecía poco realista en ese momento y desgraciadamente se confirmó. El duelo fue juzgado no contest y, por lo tanto, no tuvo ganador.
Patrik Kincl, que estaba en la esquina del púgil checo, comentó la situación en su directo de Instagram. Afirmó que el rodillazo de Wanliss no fue intencionado, aunque también admitió que Bahnik tuvo mala suerte.
Llevaba un suspensorio de metal, no de plástico. Según Kinzl, no habría resistido un golpe tan fuerte y se habría roto. Continuar el combate habría sido arriesgado, así que esperemos que Bahník no tenga ningún problema grave de salud a partir de este momento.
Fuente: Octagon MMA, Patrik Kincl, Instagram