¿El peor fichaje de la historia del Barcelona? El delantero brasileño no jugó ni un solo minuto con el club

El delantero brasileño Keirrison llegó al Barcelona en 2009 como un gran talento. El traspaso costó casi 14 millones de euros y pronto se convirtió en la pesadilla de un jugador.

El mercado de fichajes de 2009 estuvo dominado por el mayor competidor del Barcelona, el Real Madrid. Incorporó a sus filas a Cristiano Ronaldo, Karim Benzema, Kaká y Xabi Alonso.

Sin embargo, el propio Barcelona no se quedó atrás, reforzando su ataque con Zlatan Ibrahimovic. Ese mismo año, otro delantero con proyección de futuro, Keirrison, se incorporó al club.

No en vano, el ariete llamó la atención de los ojeadores catalanes. Durante su estancia en Brasil marcó 89 goles en 158 partidos en todas las competiciones.

Tras su fichaje, Keirrison no ocultó su gran entusiasmo y dijo que no veía la hora de que llegara el día de ponerse la camiseta del Barcelona. Sin embargo, eso nunca ocurrió.

Su llegada fue seguida inmediatamente por una cesión al Benfica portugués. A pesar de la enorme competencia en el ataque, sólo participó en siete partidos y cambió de lugar de trabajo al cabo de sólo seis meses. En los seis meses siguientes jugó diez partidos con el Fiorentina italiano y marcó dos goles.

La cesión iba a durar un año y medio, pero tras sólo seis meses se dio por terminada.

El maratón de préstamos no terminó y Keirrison regresó a su país de origen durante la siguiente temporada. Concretamente al Santos.

Después jugó en el Cruzeiro y en el Coritiba. En estos cuatro años, el delantero sólo marcó doce goles, por lo que no es de extrañar que el Barcelona no viera futuro en él.

El club no le renovó el contrato y regresó al Coritiba como agente libre.

Keirrison esperaba con ilusión su aventura barcelonista y confiaba en seguir con éxito los pasos de sus predecesores brasileños. Por desgracia, en este caso, ese sueño se quedó sin cumplir.

Fuente: Transfermarkt, FC Barcelona