Europa League
El Manchester United celebra la victoria ante el Barcelona y avanza a semifinales de la Europa League tras dar la vuelta al marcador
La revancha de la ida de los dieciseisavos de final de la Europa League entre el Manchester United y el Barcelona prometía ser una emocionante batalla por alcanzar los cuartos de final tras el 2-2 cosechado en el Camp Nou. Aunque los catalanes abrieron el marcador en Old Trafford, los 20 veces campeones de Inglaterra dieron la vuelta a un marcador desfavorable en la segunda parte para celebrar la victoria.
La revancha de la ida de los dieciseisavos de final de la Europa League entre el Manchester United y el Barcelona prometía ser una emocionante batalla por alcanzar los cuartos de final tras el empate a 2-2 en el Camp Nou. Aunque los catalanes abrieron el marcador en Old Trafford, los 20 veces campeones de Inglaterra dieron la vuelta a la tortilla en la segunda parte y celebraron la victoria.
Los blaugranas tuvieron que lidiar con las sensibles ausencias de Dembélé, Gavi y Pedri. Por ejemplo, Christian Eriksen y Anthony Martial, lesionados de larga duración, no jugaron con el club inglés.
Ya en el minuto 3, los Diablos Rojos dispusieron de una gran ocasión de gol, en la que Bruno Fernandes desaprovechó un remate a bocajarro de Marc-André ter Stegen. Al cuarto de hora de juego, el capitán del Manchester fue objeto de una pena máxima, al juzgar el árbitro Turpin su entrada sobre Balde como penalti.
El cañonero polaco Robert Lewandowski solventó la ocasión presentada, aunque David de Gea sacó una mano a su disparo hacia el poste derecho. Sin embargo, el guardameta español fue incapaz de despejarlo.
Un momento sorprendentemente peligroso para el Barça llegó en el minuto 36, cuando Fred intentó centrar al área desde la derecha. Sin embargo, golpeó el balón de tal manera que a punto estuvo de pasar por detrás de ter Stegen. Al final, el balón acabó en el fondo de la red.
Sin embargo, tras el gol, los pupilos de Erik ten Hag no jugaron tan bien como al principio del partido. Además, justo antes del descanso, tras una jugada brusca de De Gea, los visitantes desaprovecharon una importante oportunidad de aumentar su ventaja.
En cambio, empataron dos minutos después del descanso. El acertado pase de Fernandes fue seguido por Fred, que disparó desde fuera del área a la esquina inferior derecha de la portería barcelonista.
En el minuto 59, se agitaron más las emociones sobre el terreno de juego y se produjo una pequeña refriega. Se debió al comportamiento antideportivo de Fernandes, quien, tras una falta sobre Frenkie de Jong, metió deliberadamente el balón entre las piernas del holandés, que caía. Posteriormente, el árbitro principal mostró tarjeta amarilla al centrocampista portugués y a Franck Kessie.
Cinco minutos después, Koundé tuvo un buen remate de cabeza, pero De Gea cabeceó por encima del travesaño. Los jugadores del Manchester United, en cambio, transformaron su siguiente ocasión.
En el minuto 73, Antony hizo el 2-1, al rebotarle el balón tras bloquearse los disparos de sus compañeros. El joven brasileño saltó al campo tras el descanso, en sustitución de Weghorst.
El Barcelona no reaccionó, aunque Lewandowski pudo haber empatado en las postrimerías de la contienda. Sin embargo, su disparo fue rechazado por Varane justo fuera del área. El equipo de Xavi no podrá lograr el objetivo que se marcó tras quedar eliminado de la Liga de Campeones, que es dominar la Europa League.
El Manchester United, en cambio, puede seguir luchando por conquistar el segundo trofeo de clubes más prestigioso de Europa, tras imponerse por 2-1 y 4-3 en el global. Los Diablos Rojos serán uno de los favoritos para el triunfo de este año.
Fuente: UEFA