Fútbol
El (in)fair-play financiero del Chelsea: 611 millones de euros en seis meses para fichajes, ¿por qué la UEFA no hace nada?
Así se completó una locura absoluta y una exhibición de poder. El Chelsea completó el periodo de traspasos más loco de todos los tiempos con el traspaso más caro de la historia de la Premier League y los aficionados se preguntan lógicamente: ¿dónde está el fair-play financiero? Eso hace tiempo que se ha olvidado.
Ha sido la culminación de una locura absoluta y una exhibición de poder. El Chelsea completó el periodo de traspasos más loco de todos los tiempos con el traspaso más caro de la historia de la Premier League y los aficionados se preguntan lógicamente: ¿dónde está el fair-play financiero? Eso hace tiempo que se ha olvidado.
El Chelsea empezó a reforzarse muchísimo en verano, en la primera ventana de traspasos del nuevo propietario Todd Boehly.
Wesley Fofana llegó a Stamford Bridge por 80 millones de euros, Marc Cucurella por 65 millones, Raheem Sterling por 56 millones, Kalidou Koulibaly por 38 millones, Carney Chukwumueka por 16 millones, Pierre-Emerick Aubameyang por 12 millones, Gabriel Slonina por 9 millones y el Juventus recibió 3 millones por acoger a Denis Zakaria.
En total, el Chelsea gastó 281,99 millones de euros en verano. Pero los Blues no iban bien en otoño, así que el propietario estadounidense decidió dar un golpe sobre la mesa en invierno. Y comprar aún más.
Así, João Félix llegó a Londres cedido por 11 millones de euros, David Datro Fofana por 12 millones de euros, Andrey Santos por 12,5 millones de euros, Malo Gusto por 30 millones de euros, Noni Madueke por 35 millones de euros, Benoit Badiashile por 38 millones de euros, Mykhaylo Mudryk por 70 millones de euros (otros 30 millones de euros en primas) y como guinda del pastel, Enzo Fernández llegó el último día de traspasos por 121 millones de euros.
En total, el Chelsea gastó 330 millones de euros en el mercado de invierno. En comparación, toda la Liga gastó 35 millones de euros en la ventana de fichajes de invierno.
En total, incluyendo el verano, el Chelsea gastó 611 millones de euros, casi duplicando su récord. Hasta ahora, el Barcelona ha gastado la mayor cantidad en una sola temporada, gastando 380 millones de euros en refuerzos en la temporada 2018/19.
Lógicamente, esto nos lleva a preguntarnos: ¿dónde está el fair-play financiero? ¿No es este exactamente el tipo de gasto loco que la UEFA quería evitar? La respuesta correcta es que no quería. Al fin y al cabo, la UEFA nunca ha hecho cumplir especialmente las reglas de este sistema, y hace poco se le ocurrió abolirlo por completo.
Hasta ahora, los equipos que violaban el fair-play financiero se enfrentaban a la prohibición de participar en competiciones europeas, lo que habría supuesto un duro golpe. En la actualidad, si un equipo infringe el fair-play, se le impone una multa, que se reparte entre los demás equipos de la siguiente liga.
Así que esta regla ha perdido absolutamente su valor para los equipos ricos y los locos propietarios dispuestos a gastar miles de millones no tienen escrúpulos. Así, la Premier League se convierte en una Superliga con la que los demás equipos no tienen ninguna posibilidad de competir.
Fuente: Transfermarkt