¿Cómo mejoró Robertson sus esquinas? Hizo de su peor disciplina una prioridad

Andy Robertson tiene muchos puntos fuertes, pero jugar los saques de esquina nunca fue uno de ellos. Sin embargo, ha trabajado muchísimo esta disciplina y ahora es uno de sus puntos fuertes. ¿Cómo lo ha conseguido y qué le ha llevado a hacerlo?

«Posdata: necesito entrenar los saques de esquina», fue el pie de foto de Andy Robertson en un post de Instagram el 16 de diciembre de 2018. El Liverpool acababa de ganar 3-1 al Manchester United en Anfield, el último partido de José Mourinho en el banquillo de los diablos rojos.

En aquel momento, el propio técnico portugués se maravilló del incansable ritmo de trabajo del lateral izquierdo del Liverpool. Estoy cansado de ver a Robertson. Hace un sprint de cien metros cada minuto», dijo Mourinho después del partido. Pero aunque todo el mundo se ha acostumbrado a su físico, incluso en un partido tan bueno hubo algo que criticar.

Robertson, de hecho, jugó cuatro saques de esquina, uno en corto, y golpeó tres veces al primer defensa del United. No jugó ni un solo córner el resto de la temporada.

Han pasado cuatro años y Robertson es uno de los mejores rematadores de la Premier League. Esta temporada, el Liverpool ha marcado 24 goles tras situaciones estándar ejecutadas por Robertson. Además, ha repartido 15 asistencias, cinco de las cuales proceden directamente de saques de esquina.

Los mejores sacadores de esquina de la Premier League

Los goles esperados (xG) contabilizan el número de disparos en los seis segundos siguientes a la ejecución de un saque de esquina

¿Cómo ha llegado Robertson a ser tan bueno en algo que se le daba tan mal?

El capitán escocés declaró al diario The Athletic que le costaba dar altura al balón cuando remataba desde el punto de penalti. Por eso, a menudo sus compañeros le jugaban el balón para que lo golpeara en movimiento.

«No conseguía despegarlos del suelo. No sé por qué. Era algo que quería añadir a mi juego. Siempre es genial demostrar a la gente lo contrario», dijo Robertson.

«He trabajado muy duro durante la temporada 2018-19 para mejorar en ello. Quería añadir la capacidad de jugar los córners con la zurda, porque antes solo Trent Alexander-Arnold o James Milner los jugaban con la derecha. Intenté convertirme en esa opción zurda y creo que lo conseguí», dice el defensa de 28 años.

Y lo consiguió. Si en la temporada 2018/19 disputó cinco saques de esquina, esta campaña ya ha jugado 75. El factor principal es que su xG, los goles esperados tras sus córners, ha subido. Desde la temporada 2019/20, la xG se ha disparado de 0,8 a 2,7. Esto hace que cada córner de Robertson sea cada vez más peligroso.

La concentración es clave

«Todavía no puedo creer que Robbo esté pateando córners. Nunca conseguirías que lo hiciera», dice David Meyler, ex compañero del Hull City en el Athletic. Lo hacía fatal. Algunos daban en el primer jugador, otros pasaban por encima de todos los jugadores del área. Pero ha trabajado en ello y ahora sus centros son irreales. Puedes ver que si trabajas duro en algo, obtendrás resultados», añadió Meyler.

Yo no diría que ha cambiado su estilo de patear, pero ha mejorado su concentración. Es más natural para alguien como Trent. Robbo no me lo perdonará, pero para él no es algo natural. Si nos fijamos en David Beckham, que era uno de los mejores del mundo, nunca corría hacia la esquina, siempre miraba a su alrededor concentrándose en dónde quería chutar», reflexiona Meyler.

Robertson y otros jugadores del Liverpool empezaron a trabajar con neurocientíficos para ayudarles a concentrarse mejor en determinadas situaciones.

Alexander-Arnold y Robertson tienen la gran ventaja de que el Liverpool cuenta con grandes cabeceadores en Van Dijk, Konate, Matip y Fabinho. Pero su trabajo es encontrar a sus compañeros de equipo, o más bien el espacio donde cobran. Robertson juega la mayoría de las veces sus córners entre la cal pequeña y el área de penalti, donde suelen cargar tres jugadores de los Reds.

Robertson juega los saques de esquina desde la izquierda para mantener el balón lejos de la portería, Alexander-Arnold desde la derecha. Juntos forman una de las grandes armas del Liverpool, desde la que el equipo de Jürgen Klopp marca muchos goles. Y, sin embargo, hace unos años, Robertson todavía era incapaz de superar al primer defensa.

Fuente: The Athletic