¡Alemania envía un claro mensaje a los húngaros! El Allianz Arena se iluminará con los colores del arco iris

El martes 15 de junio, Hungría entró en la Eurocopa con su primer partido. Pero ese mismo día, el Parlamento húngaro aprobó una ley que prohíbe cualquier promoción de la comunidad LGBT. La medida ha sido muy criticada y Alemania también planea enviar un mensaje claro.

Hungría no goza precisamente de la mejor reputación en Europa, por varias razones, en particular el nacionalismo extremo, un racismo bastante común y la discriminación contra la comunidad LGBT.

En particular, la discriminación contra la comunidad LGBT alcanzó un nuevo nivel hace muy poco, cuando se aprobó una legislación que prohíbe la difusión de material que represente o promueva la homosexualidad y la reasignación de género entre los jóvenes menores de 18 años.

Sin embargo, la legislación también contiene enmiendas que prohíben la representación de una orientación sexual distinta a la heterosexual en programas escolares, películas o anuncios dirigidos a menores. Con esta medida, el gobierno espera conseguir un desarrollo físico y mental sano de los niños.

Sin embargo, la medida ha sido criticada no sólo en Hungría, sino también en el extranjero. En particular, en Alemania, que condena el nacionalismo y todas las manifestaciones de odio o discriminación contra las minorías.

Incluso los clubes de fútbol alemanes luchan regularmente contra la discriminación, al igual que la selección nacional. Por ejemplo, el portero Manuel Neuer jugó contra Portugal y Francia llevando un brazalete de capitán con los colores del arco iris para mostrar su apoyo a la comunidad LGBT.

Y cuando el Allianz Arena de Múnich acoja el partido de Alemania contra Hungría el miércoles, podría enviar un claro mensaje a los húngaros.

De hecho, los concejales de Múnich han presentado una propuesta para iluminar el Allianz Arena con los colores del arco iris en la capital bávara.

«Múnich apoya la diversidad, la tolerancia y la igualdad en el deporte y en la sociedad. El ayuntamiento desea enviar un mensaje visible de solidaridad a la comunidad LGBT de Hungría, discriminada por una legislación recientemente aprobada», reza la propuesta de las seis facciones del ayuntamiento de Múnich.

Según los concejales, en Hungría se restringe sistemáticamente el Estado de Derecho, y lo mismo ocurre con las libertades humanas fundamentales. La ley viola también la Carta de los Derechos Fundamentales de la UE y la Convención de la ONU sobre los Derechos del Niño. Y viola aún más.

Cabe mencionar que incluso el portero húngaro Peter Gulacsi, que juega en el club RB Leipzig, expresó recientemente su apoyo al matrimonio entre personas del mismo sexo.

Sin embargo, esto no significa nada en Hungría. De hecho, a los partidos de la Eurocopa acuden grupos de ultraderecha que no ocultan sus actitudes y opiniones antisemitas y racistas.

En los dos partidos que albergó Budapest, los sectores situados detrás de la portería fueron ocupados por la llamada Brigada de los Cárpatos, un grupo de ultras neonazis que entonó cánticos contra la comunidad LGBT en el estadio. También había pancartas criticando el arrodillamiento de los futbolistas.

El comportamiento de los aficionados húngaros en ambos partidos ya está siendo investigado por la UEFA.

Fuente: DW