Los aficionados se enfadaron por el penalti simulado de Sterling. Probablemente no lo fue, pero a quién le importa, dice la leyenda inglesa

En la semifinal de la Eurocopa entre Dinamarca e Inglaterra, la primera parte de la prórroga estaba llegando a su fin cuando el árbitro principal se «comió» el salto de Raheem Sterling dentro del área y señaló penalti. La situación enfureció a casi todos los aficionados al fútbol, excepto a los ingleses, que no se quejan en absoluto.

A lo largo del campeonato, los árbitros principales han sido muy elogiados por su actuación. Dejaron fluir el juego, no cometieron grandes errores y trabajaron bien con el VAR cuando sólo se examinaron los errores auténticos.

Sin embargo, Danny Makkelie dejó una gran mancha negra en la actuación de los árbitros en la semifinal. Su error garrafal es tanto más incomprensible cuanto que fue aprobado por el VAR.

En el minuto 102, Sterling se escapó por la banda derecha, pero en ese momento había dos balones sobre el terreno de juego. En tal situación, el árbitro debería haber detenido el juego, pero no lo hizo.

Posteriormente, Sterling se escabulló de dos defensas y, como mostró la grabación a cámara lenta, se excedió en su caída. Sin embargo, el árbitro, con el visto bueno del VAR, invalidó el penalti y clasificó a Inglaterra para la final.

Esto, por supuesto, desató una enorme ola de descontento entre los aficionados de todo el mundo, que empezaron a calificar el partido de «robo a plena luz del día»

Pero el legendario delantero inglés Michael Owen optó por un estilo ligeramente diferente. » No estoy seguro de si fue penalti, pero a quién le importa»

Fuente: Michael Owen, Livesport