Mike Tyson describe sus experiencias en prisión

El ex campeón del mundo de los pesos pesados y uno de los boxeadores más temibles del planeta, Mike Tyson, se sincera en una entrevista sobre sus problemas con los guardias de prisiones durante su estancia en la cárcel.

La infancia de Mike Tyson no fue precisamente de color de rosa

Mike Tyson fue un hombre que experimentó al máximo los altibajos de la vida. Aunque durante la cúspide de su carrera vivió una vida con la que sueña la mayoría de la gente del planeta, hubo momentos en los que experimentó bajones absolutos.

Incluso a una edad temprana, Mike llevaba una vida que distaba mucho de ser lujosa. Hijo de una familia monoparental, creció en la calle y pasó de un problema a otro. A los 13 años, había sido detenido 38 veces antes de entrar en el mundo del boxeo. » Pelear en las calles, atracar, robar, ese era mi pan de cada día», recordaba Mike Tyson de su infancia en el Club Shay Shay de Shannon Sharpe.

Cus D’Amato y el boxeo cambiaron su vida

Un niño con un pasado familiar poco alentador no conoció a su propio padre. Su padrastro era un gandul callejero y un jugador, su madre una alcohólica. Su futuro no era brillante. Al menos hasta que conoció al entrenador de boxeo Cus D’Amato, que se convirtió en su tutor tras la muerte de ambos padres.

Con su entrenador, alcanzaron la cima del boxeo y Tyson se convirtió en el campeón mundial de los pesos pesados más joven del mundo, a la edad de 20 años. Aunque defendió su título varias veces y se convirtió en uno de los mejores boxeadores de peso pesado de la historia, el joven seguía enfrentándose a sus demonios.

Tyson describe sus problemas en la cárcel

Pero el éxito le pasó factura. En 1990 perdió el título ante Buster Douglas. El alcohol, las drogas y una vida desenfrenada llena de dinero le pasaron factura y en 1991 fue condenado a seis años de cárcel por la violación de Desiree Washington, una joven de 18 años.

En una entrevista con Shannon Sharpe, describió sus desagradables experiencias en prisión. Aunque estaba en una celda con otros reclusos, debido a su temible reputación, sus compañeros de celda se mantenían alejados. » Yo era más bien un alborotador», esbozó sus problemas con los guardias.

«Respeto que estén en una posición de autoridad, pero incluso una persona así puede dar sus órdenes con respeto, y eso a menudo no ocurría «, relató el ex campeón del mundo. » Hay una diferencia entre decir ‘tienes que irte ya ‘ o ‘vete , coge tu p..el'», dijo, describiendo situaciones que a menudo le metían en problemas por su carácter explosivo.

En 1995 fue puesto en libertad tras cumplir menos de tres años de su condena. Reanudó entonces su carrera boxística y volvió a ganar el título mundial de los pesos pesados. Se unió así a las filas de leyendas como Floyd Patterson y Muhammad Ali, que consiguieron recuperar el título tras haberlo perdido.

Sin embargo, nunca volvió a ser el mismo boxeador temible tras regresar de la cárcel y en 2005, después de una serie de derrotas, decidió retirarse del boxeo profesional. Aunque su carrera estuvo plagada de numerosos escándalos, «Iron Mike» fue sin duda una de las figuras más significativas de la historia del boxeo y dejó una enorme huella en este deporte.

Fuente: Canal YouTube Club Shay Shay, Wikipedia