Una ventana al pasado: Zdeněk Zeman triunfó en Italia, hacía fútbol de otra manera

Zdeněk Zeman, nacido en Praga y rechazado por el régimen comunista, causó un gran impacto como entrenador en el extranjero, especialmente en los banquillos de los clubes italianos. Se ha convertido literalmente en una leyenda, y recientemente ha celebrado su partido número 1.000 en el país de los campeones de Europa, durante su actual compromiso con su club favorito, el Calcio Foggia 1920.

Aunque llevaba sangre futbolística en el cuerpo, y no una sangre cualquiera, pues su tío era Čestmír Vycpálek, el destacado delantero centro del Slavia de Praga en los años 40, que se marchó a Italia después de la guerra y más tarde dirigió como entrenador al campeón Juventus de Turín, Zeman se dedicó más al voleibol -a un nivel muy alto- y a la natación.

Solía seguir a su tío de vacaciones a Palermo (Italia), donde se quedó ilegalmente como estudiante de 22 años en 1969, tras la ocupación de Checoslovaquia por las tropas del Pacto de Varsovia.

Buscaba una nueva carrera y la encontró en el fútbol. En 1981 empezó a entrenar a juveniles en el US Palermo, y luego se hizo cargo del desconocido Liscata amateur, con el que ascendió a tercera división.

Su carrera despegó. ¿Por qué era especial? » Porque yo hacía fútbol de forma diferente a lo que se acostumbraba en Italia en aquella época», admite Zeman.

«Estudié en la Universidad del Deporte de Praga, donde trabajé con el renombrado metodólogo del fútbol, el profesor asociado Milan Navara. Aunque me especialicé en voleibol, eso me proporcionó una mejor comprensión del fútbol, que luego utilicé en Italia. Cambié mi perspectiva del fútbol», revela su valor añadido.

De hecho, apostó por el ataque. «En Italia, los entrenadores se centraban en el sistema defensivo, el famoso catenaccio, mientras que yo abría más el juego. Desplegaba tres delanteros, cambiaba a zona en defensa. Eso fue una gran ventaja, porque ellos no estaban acostumbrados y fue sorprendente», explica.

Zdenek Zeman, nacido en Praga y que cumplió 74 años en mayo, se ha convertido en una figura reconocida en Italia. Ha dirigido la impresionante cifra de 100 partidos para clubes locales.

Si sumara los partidos que ha jugado en otros países -Turquía (Fenerbahce Estambul), Serbia (Crvena Zvezda Belgrado) y Suiza (Lugano)-, su cuenta aumentaría en otros diez.

Fuente: Wikipedia